En los
últimos años hacer remakes y reboots de otros filmes o nuevas adaptaciones de
libros que prometen ser más apegadas al escrito que la primera versión, se ha
convertido en una moda de Hollywood, pero vaya que es extremadamente raro que
la nueva versión supere a la original o que cause el mismo impacto en la
audiencia y lamentablemente esta no es la excepción.
Para empezar la historia es totalmente diferente a la que conocemos: una pareja de exploradores junto a su pequeño hijo de cuatro años se encuentran buscando rastros de un meteorito que cayó en la selva de África hace millones de años para encontrar nuevas formas de energía, pero en su búsqueda los padres del niño mueren en un accidente aéreo dejando a la deriva a su hijo, el cual es rescatado y criado por una simia. Años después poco queda del humano que conocimos y ahora es una persona que se deja llevar por su instinto animal y deberá enfrentarse con un empresario que planea acabar con la selva con tal de encontrar el poderoso meteorito.
El trabajo de los actores de doblaje es bastante malo o mejor dicho sus voces no fueron las indicadas para los personajes a los cuales dan vida .
La animación es otro de los puntos débiles de la trama, ya que por momentos los personajes se ven muy falsos y se asemeja mucho a la utilizada en las cintas de Barbie. Eso si: los diversos paisajes que muestra el filme son sorprendentes. En cuanto al 3D se refiere, son pocos los momentos de buen uso los que se le da.
Pero lo más débil de la película es su guión, el cual con tal de "entretener" al espectador busca crear toda clase de situaciones extravagantes y fuera de lugar que a fin de cuentas lo único que terminan por hacer es cansar.
TARZÁN es uno de los tantos ejemplos de que a veces es mejor dejar una historia tal y como está para no cometer un error garrafal y echar a perder una historia que ya había sido contada de una buena manera.
Para empezar la historia es totalmente diferente a la que conocemos: una pareja de exploradores junto a su pequeño hijo de cuatro años se encuentran buscando rastros de un meteorito que cayó en la selva de África hace millones de años para encontrar nuevas formas de energía, pero en su búsqueda los padres del niño mueren en un accidente aéreo dejando a la deriva a su hijo, el cual es rescatado y criado por una simia. Años después poco queda del humano que conocimos y ahora es una persona que se deja llevar por su instinto animal y deberá enfrentarse con un empresario que planea acabar con la selva con tal de encontrar el poderoso meteorito.
El trabajo de los actores de doblaje es bastante malo o mejor dicho sus voces no fueron las indicadas para los personajes a los cuales dan vida .
La animación es otro de los puntos débiles de la trama, ya que por momentos los personajes se ven muy falsos y se asemeja mucho a la utilizada en las cintas de Barbie. Eso si: los diversos paisajes que muestra el filme son sorprendentes. En cuanto al 3D se refiere, son pocos los momentos de buen uso los que se le da.
Pero lo más débil de la película es su guión, el cual con tal de "entretener" al espectador busca crear toda clase de situaciones extravagantes y fuera de lugar que a fin de cuentas lo único que terminan por hacer es cansar.
TARZÁN es uno de los tantos ejemplos de que a veces es mejor dejar una historia tal y como está para no cometer un error garrafal y echar a perder una historia que ya había sido contada de una buena manera.
CALIFICACIÓN: 4/10
A
CONTINUACIÓN LES COMPARTO EL TRAILER DEL FILME:
Síganme en Twitter: @MauriMorales93
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